2017-08-16 12:09:00

El Papa a Taizé: “El hermano Roger fue un testigo incansable del Evangelio de la paz y de la reconciliación”


(RV).- “La Comunidad de Taizé cumple 75 años. Deseo dirigir mi saludo, acompañado con mi oración a los hermanos, en el recuerdo de su amado fundador Roger Schutz, del que hemos recordado el X aniversario de su muerte, hace tres días. ¡Buen camino para la comunidad de Taizé!”. Con estas palabras el Papa Francisco alentaba al término de la Audiencia General, del tercer miércoles de agosto de 2015, a la Comunidad Ecuménica de Taizé en la víspera del 75° Aniversario de su fundación y recordaba a su fundador, quien fue asesinado por una enferma mental en el año 2005 durante la oración vespertina.

Taizé: una auténtica «parábola de comunión»

Han pasado más de 12 años de la muerte de Frère Roger Schutz, Fundador de la Comunidad Ecuménica de Taizé y su testimonio y ejemplo de fe sigue inspirando a muchos jóvenes en todo el mundo. “El hermano Roger fue un testigo incansable del Evangelio de la paz y de la reconciliación, animado por el fuego de un ecumenismo de la santidad”, escribía el Papa Francisco en su Mensaje a la Comunidad de Taizé, con ocasión del 75° Aniversario de su fundación. “Fue este fuego – señalaba el Pontífice – el que lo impulsó a fundar una comunidad que se puede considerar una auténtica «parábola de comunión» que, hasta nuestros días, sigue desempeñado un papel muy importante en la construcción de puentes de fraternidad entre los cristianos”.

Taizé: un lugar de encuentro y reconciliación

El hermano Roger, escribía el Obispo de Roma, buscando con pasión la unidad de la Iglesia, Cuerpo de Cristo, se abrió a los tesoros custodiados en las diversas tradiciones cristianas, sin provocar una ruptura con su origen protestante. “Con la perseverancia que ha demostrado durante su larga vida – precisaba el Papa – contribuyó en la modificación de las relaciones entre cristianos aún separados, trazando para muchos un camino de reconciliación”.

El hermano Roger, agregaba el Papa Francisco, nutriéndose con la Sagrada Escritura, se remitía también a la enseñanza de los santos Padres de la Iglesia, recurría a las fuentes cristianas y sabía hacerlas actuales entre los jóvenes. “El hermano Roger – señalaba el Pontífice – comprendía a las nuevas generaciones; confiaba en ellos. Él hizo de Taizé un lugar de encuentro donde jóvenes de todo el mundo se sienten respetados y acompañados en su búsqueda espiritual”.

Taizé: Amor por los pobres y los últimos

“El hermano Roger – concluía el Santo Padre – amó a los pobres, a los olvidados, a quienes, aparentemente, no cuentan para nada; y testimonió, con su vida y con la de sus hermanos, que la oración va de la mano con la solidaridad humana”. Por ello, decía el Papa Francisco, “doy gracias a Dios, Padre, Hijo y Espíritu Santo, por el don de la vida del hermano Roger, hasta su muerte violenta. Que la Comunidad de Taizé mantenga siempre encendidos el testimonio que dio de Cristo resucitado y el llamamiento que renovó de forma incesante de «elegir amar»”.

(Renato Martinez – Radio Vaticano)








All the contents on this site are copyrighted ©.