2017-08-04 12:09:00

Carta del Papa Francisco para encuentro de oración por la paz en Japón


(RV).- Orar y trabajar por la paz, impulsando la armonía en los numerosos lugares del mundo lacerados por la guerra y el terrorismo. Es la exhortación del Papa Francisco

Asegurando su cercanía espiritual, el Obispo de Roma dirigió una carta con motivo del XXX encuentro de oración en el monte Hiei, en Kioto. La misiva pontificia, dirigida al venerable Koi Morikawa, sumo sacerdote de la denominación budista tendai, fue entregada y leída por el enviado personal del Papa, el Card. John Tong Hon, Obispo emérito de Hong Kong, en la apertura de dicho encuentro. (3 de agosto de 2017)

Este encuentro en tierra japonesa se inspira en la histórica Jornada Mundial de Oración por la Paz, convocada por San Juan Pablo II, en Asís, el 27 de octubre de 1986. Uno de sus participantes, el venerable Etai Yamada, líder del budismo tendai, había quedado tan profunda y bellamente impactado por el espíritu de ese evento, que empezó a convocar, desde 1977, una cita de oración en ese monte sagrado para los budistas. La fecha elegida es para recordar la tragedia de la bomba atómica en Hiroshima y Nagasaki, el 6 y 9 de agosto, respectivamente, de 1945.

Extendiendo sus cordiales saludos  a todos los participantes, representantes de las diversas tradiciones religiosas, el Papa Francisco reitera su unión en la oración por un renovado florecer de la concordia y de la armonía para toda la humanidad.

Señalando que «esta cumbre religiosa anual contribuye de forma significativa a la construcción de ese espíritu de diálogo y de amistad, que permite a los seguidores de las religiones del mundo trabajar juntos para abrir nuevos caminos para la paz en nuestra familia humana», el Santo Padre recuerda que la oración «inspira y sostiene nuestro compromiso por la paz, pues ayuda a hacer más profundo nuestro respeto recíproco como personas, refuerza vínculos de amor entre nosotros e impulsa a cumplir esfuerzos firmes para promover relaciones justas y  la solidaridad fraterna».

Como destacó también en Asís, en la clausura de la Jornada Mundial de Oración por la Paz, el 20 de septiembre de 2016, el Papa Francisco recuerda que «en el mundo actual, marcado por la violencia, el terrorismo y por crecientes amenazas contra la tierra, nuestra casa común, este testimonio de oración y de solicitud compartida transmite un mensaje fundamental a los hombres y mujeres de buena voluntad».

En efecto, como hombres de fe – escribe el Papa - «creemos que la paz duradera es verdaderamente posible, porque sabemos que nada es imposible si nos dirigimos a Dios en la oración».

(CdM – RV)








All the contents on this site are copyrighted ©.