«Dios nos salva de la esclavitud del pecado», nuestra audiencia en las Redes Sociales

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(RV).- «Dios nos salva de la esclavitud del pecado y nos enseña a caminar. Por medio de su perdón, todo hombre y mujer de este mundo es renovado por dentro y levantado en la dignidad de Hijos suyos», lo recordó el Papa Francisco en su homilía del tercer Retiro Mundial de Sacerdotes, que tuvo lugar del 12 al 14 de junio de 2015 en la Basílica de San Juan de Letrán en Roma. En nuestro espacio de interactividad Tu comentario ayuda, tu opinión cuenta de Radio Vaticana; reflexionamos hoy junto a nuestra audiencia en las Redes Sociales sobre algunos de los fragmentos más profundos que pronunció  el Santo Padre:

«En la primera lectura nos adentramos en la ternura de Dios. Y lo que Dios dice a su pueblo en esta lectura del profeta Oseas, capítulo 11, versículo primero en adelante; lo dice a cada uno de nosotros. Y nos hará bien tomar este texto en un momento de soledad, ponernos en la presencia de Dios y escuchar cuando nos dice esto: "Cuando vos eras chico yo te amé"; te amé desde niño, te salvé, te traje de Egipto, te salvé de la esclavitud; de la esclavitud del pecado, de la esclavitud de la autodestrucción, y de todas las esclavitudes que cada uno conoce, que tuvo o tiene dentro. "Yo te salvé, yo te enseñé a caminar". Qué lindo escuchar "Dios me enseña a caminar"; el Omnipotente se abaja y me enseña a caminar. 

«Recuerdo esa frase del Deuteronomio, cuando Moisés le dice a su pueblo, “escuchen ustedes que son tan duros de cabeza”, cuándo vieron un Dios tan cercano a su pueblo como Dios está cercano a nosotros. Y la cercanía de Dios es esta ternura: me enseñó a caminar, sin Él yo no sabría caminar en el Espíritu (...) Y lo tomaba por los brazos pero vos no reconociste que yo te cuidaba. Vos te creíste que te las arreglabas solo. Esta es la historia de cada uno de nosotros. Decíme, ¿ésta no es tu historia? Al menos es mi historia. Cada uno de nosotros puede leer aquí su propia historia».

En el marco del Jubileo de la Misericordia, compartimos algunos mensajes que recibimos de nuestros seguidores en Facebook y en Twitter contándonos cómo la salvación de Dios se ha manifestado en sus vidas. Escuchemos:

Juan Cruz Salas de Chile comparte: “Mi vida estaba vacía hasta que conocí la Buena Nueva del Evangelio. Al principio me resistí a aceptar que existe un Dios  tan misericordioso. No podía comprender que fuera un Dios tan bueno, dispuesto a perdonarnos y renovarnos a través de la Eucaristía. Dios nos salva de la esclavitud del pecado y de la opresión del mundo superficial en el que vivimos. Sólo él nos da la libertad verdadera”.

Ester Ríos de Madrid comenta: “Dios dice que para ir al cielo, tenemos que nacer de nuevo. En Juan capítulo 3, versículo 7; Jesús dice a Nicodemo: «Os es necesario nacer de nuevo». Dios nos muestra, a través de su Palabra, el plan de cómo nacer de nuevo; de cómo salvarnos y el primer paso para renacer, es reconocerse pecador. Somos pecadores y necesitamos volver a la Casa del Padre, como el Hijo pródigo. Necesitamos beber de su misericordia”.

Kike Santos de Sevilla escribe: “Este Año Santo de la Misericordia es la oportunidad ideal para plantearnos hacia dónde estamos dirigiendo nuestras vidas. No debemos fiarnos de nuestros sentimientos y deseos,  pues ellos van cambiando con el tiempo. Mejor fiarse de las promesas de Dios, que son eternas. Él nos ha salvado mediante el sacrificio de Jesús en la cruz. No nos ha abandonado ni lo hará jamás".

Óscar Maristas nos escribe desde México: “Mi historia de salvación es fruto de la misericordia de Dios, quien me vio tocar fondo y desear incluso la muerte antes que vivir en este mundo en el que todo parecía salirme mal y en el que sólo conocía el sufrimiento. Pero él tuvo piedad de mí y por medio de los misioneros de mi ciudad conocí el testimonio de la vida cristiana. Hoy soy un hombre nuevo, un hombre renacido.

El equipo de redacción de Radio Vaticana agradece todos los mensajes y cartas que recibimos diariamente. Los invitamos a que sigan interactuando con nosotros ayudándonos en nuestra misión de difundir la Voz y el Magisterio del Papa por todas las periferias y a que visiten también nuestra cuenta en Pinterest.

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