"Todas las campanas de El Salvador sonaron por Romero", Mons. Rosa Chávez

(RV).- “Mons. Romero creía en su función como obispo y primado del país y se sentía responsable de la población, especialmente de los más pobres: por eso se hizo cargo de la sangre, del dolor, de la violencia, denunciando las causas en su carismática predicación dominical seguida a través de la radio por toda la nación”, fueron palabras de Mons. Vincenzo Paglia, Presidente del Pontificio Consejo para la Familia y postulador de la causa de beatificación de Oscar Arnulfo Romero, ante los medios de comunicación en la Oficina de Prensa de la Santa Sede. Se resaltó así, la figura del arzobispo salvadoreño, asesinado en 1980 mientras celebraba la Santa Misa y del que el Papa Francisco firmó el decreto por el que se reconocía el martirio.

El trabajo de la Congregación para las Causas de los Santos - con el cardenal Angelo Amato – ha sido atento y solícito, aseguró Mons, Paglia, explicando que por unanimidad de pareceres, tanto de la comisión de cardenales como de la comisión de teólogos, se confirmó el martirio en ''odium fidei''... El martirio de Romero dio sentido y fuerza a muchas familias salvadoreñas que habían perdido a familiares y amigos durante la guerra civil. Su memoria se convirtió de inmediato en el recuerdo de las otras víctimas, tal vez menos conocidas, de la violencia.

En este contexto, Radio Vaticano entrevista a Mons. Gregorio Rosa Chávez, obispo auxiliar de San Salvador, quien explica la emoción que vivieron al conocer la noticia a través de nuestra emisora, y sintieron una “alegría indescriptible”. “Celebramos una misa de acción de gracias y nos organizamos para que todas las campanas del país sonaran a las seis de la tarde”, aseguró. Además el obispo, quien era amigo de Mons. Romero cuando era seminarista, le reconoce como “modelo de pastor, un hombre de Dios, hombre de la Iglesia, servidor de los pobres”. Escuchemos.

(MZ-RV)