El Papa: hoy en día hay más mártires cristianos que en los primeros siglos
(RV).- (Audio. Actualizado con video) Hay más cristianos
perseguidos hoy que en los primeros siglos: es lo que dijo Papa Francisco en Santa
Marta, quien presidió la misa en el día en que recordamos a los santos Protomártires
de la Iglesia Romana, cruelmente asesinados a los pies de la colina del Vaticano por
orden de Nerón después del incendio de Roma en el año 64:
La oración al inicio
de la Misa recuerda que el Señor ha “fecundado con la sangre de los mártires los primeros
brotes de la Iglesia de Roma”. “Se habla del crecimiento de una planta”, afirmó el
Papa en la homilía, y esto hace pensar en lo que decía Jesús: “El reino de los cielos
es como un hombre que ha arrojado la semilla a la tierra, luego va a su casa y – duerma
o esté despierto - la semilla crece, brota, sin que él sepa cómo lo ha hecho”. Esta
semilla es la Palabra de Dios que crece y se convierte en el Reino de Dios, se convierte
en Iglesia gracias a “la fuerza del Espíritu Santo” y al “testimonio cristiano”.
“Sabemos
que no hay crecimiento sin el Espíritu: es Él quien hace la Iglesia, es él el que
hace crecer a la Iglesia, es él el que convoca la comunidad de la Iglesia. Pero también
requiere el testimonio de los cristianos. Y cuando el testimonio llega al final, cuando
las circunstancias históricas nos piden un testimonio fuerte, allí están los mártires,
los más grandes testigos. Y aquella Iglesia es regada por la sangre de los mártires.
Y esta es la belleza de martirio. Comienza con el testimonio, día tras día, y puede
terminar como Jesús, el primer mártir, el primer testigo, el testigo fiel: con la
sangre”.
Pero hay una condición para que el testimonio sea verdadero,
agregó el Papa – “debe ser sin condiciones”
“Hemos escuchado el
Evangelio, el que dice al Señor que lo sigue pero con una condición: ir a despedirse
o a enterrar a su padre... el Señor lo detiene: “¡No!”. El testimonio es sin condiciones.
Debe ser permanente, debe ser decidido, debe ser con aquel lenguaje que Jesús nos
dice, que es tan fuerte: “Que tu sí sea sí, que tu no, no”. Este es el lenguaje del
testimonio”.
“Hoy - dijo el Papa - miramos esta Iglesia de Roma
que crece, regada por la sangre de los mártires. Pero también es justo - continuó
- que pensemos en tantos mártires de hoy, tantos mártires que dan su vida por la fe”.
Es cierto que han sido muchos los cristianos perseguidos en la época de Nerón, pero
“hoy - señaló - no son menos”:
“Hoy en día hay tantos mártires en la
Iglesia, muchos cristianos son perseguidos. Pensemos en el Medio Oriente, los cristianos
que deben huir de las persecuciones, los cristianos asesinados por sus perseguidores.
También los cristianos expulsados de manera elegante, con guantes blancos: esta también
es una persecución. Hoy en día hay más testigos más mártires en la Iglesia que en
los primeros siglos. Y en esta misa, recordando a nuestros gloriosos antepasados,
aquí en Roma, también pensamos en nuestros hermanos y hermanas que viven perseguidos,
que sufren y que con su sangre hacen crecer la semilla de tantas pequeñas iglesias
que nacen. Oramos por ellos y también por nosotros”.